Pues bien, el 24 de febrero se entregaron los Premios de la Academia y vaya noche. Por desgracia, no gané el premio en la categoría de mejor guión. (Me han informado de que es necesario escribir realmente un guión para poder optar al premio). Semántica.
Por lo tanto, ha llegado el momento, una vez más, de anunciar los ganadores de algunas de las categorías que no recibieron la pompa y circunstancia que recibieron los premios más importantes.
Como no pudimos conseguir que Jon Stewart fuera el maestro de ceremonias, yo me encargaré de las tareas tradicionales de presentador. Primero, mi monólogo:
Buenas noches, señoras y señores de la industria cinematográfica, por los que siento un enorme respeto (esto es lo que en el mundo del espectáculo se conoce como «hacer la pelota»). Qué bien me lo he pasado esta noche para llegar hasta aquí. No es que me asombren las estrellas con las que me codearé esta noche, pero como a DeNiro le dio por venir aquí, me monté en mi Mercedes McCambridge y conduje por el río Phoenix. Era Tom Cruising, cuando de repente, me encontré en un Chevy Chase. Justo cuando creía que no podía soportar a Demi Moore, me tropecé con un Chris Rock y experimenté un Allen Payne extremo. Créeme, no es mi intención Jody Foster esta situación, así que pongámonos en plan Richard Gere, antes de que me encierren en una Nicholas Cage (risas, aplausos).
Nuestra primera categoría es la mejor foto sobre Vacaciones de primavera en Fort Lauderdale. Y la ganadora es «No es país para viejos».
A continuación, la mejor foto sobre la capital de Alaska. Y la ganadora es «Juno». (Oh, vamos, alguien iba a hacerlo, en algún momento).
Y ahora me complace enormemente presentar el Premio a la Trayectoria de este año. Este año es para un señor que lleva más de setenta años en el cine. Ha participado en más de 500 películas, pero nunca ha protagonizado ninguna. Nunca ha conseguido ni siquiera un primer plano. El Premio a la Trayectoria de este año es para el veterano especialista de noventa años, «Pops» Flanagan.
(La cámara se desplaza hacia arriba hasta una pasarela sobre el escenario y disparo tres balas de fogueo con una pistola de «atrezzo». «Pops» cae hacia delante y aterriza en una mesa de dados que se rompe. Se levanta y se acerca al estrado).
POPS: Bueno, llevo en el negocio desde los años 20. Antes del cine sonoro. Podrían haber hecho películas sonoras, pero los directores no querían que se oyera a los dobles mariquitas que tenían entonces llorar como niñas cuando se caían del caballo o algo así. Menuda panda de bragas. Joder, me he caído de edificios, me han prendido fuego y me han dado puñetazos en la cara más veces de las que puedas imaginar. ¿Conoces todas las caídas que hacía Peter Sellers en las películas de la Pantera Rosa? Ese era yo. ¿Sabes toda esa basura que solía soltar Burt Reynolds sobre que él hacía sus propias acrobacias? ¡Tonterías! Ese era yo. Las únicas acrobacias que hizo Reynolds fueron acostarse con mujeres hermosas. ¿Crees que alguna vez me pediría que hiciera alguna de esas acrobacias para él? El cobarde. Bueno, gracias por el premio, aunque merezco más. (Aplausos mientras sale «Pops».)
Gracias, Pops, buena actitud. Y, por último, nuestro último premio de la noche. El premio a la mejor película sobre un protésico dental, justo antes de limpiar los dientes de un paciente. Y el ganador es: «There Will Be Blood».
Pues bien, conseguimos pasarnos seis horas. Creo que es hora de dar las buenas noches. Así que, hasta el año que viene, recuerda: «Nos vemos en el cine, justo después de que hayas pedido un préstamo para pagar las entradas». (Aplausos) Desvanecimiento.